Deméter, hija de Chrono y Rea, para la población griega era su diosa de la siembra, los cereales y las plantas; la divinidad a la que debían honrar en tiempos de cosecha. Todos los años era la inmortal encargada de hacer madurar el dorado trigo en los campos helenos y, cada final de verano, los habitantes, contentos y satisfechos, salían en procesión para agradecerle la fertilidad de sus tierras y abundancia de los frutos.
Deméter
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